Desde que los hombres nos hemos reunido  en comunidades , el gobierno de las mismas (el ejercicio del poder) se ha fundamentado en una serie de elementos  metafísicos como era la voluntad de divina, las costumbres y las tradiciones. Esta creencia  fue cuestionada en el siglo XV por un pensador inglés llamado Thomas Hobbes. Para él, el poder político lo construíamos los seres humanos a través de un proceso racional y no surgía de ninguna instancia superior al hombre.

¡¡Ésta fue la gran revolución del pensamiento que dio origen a la modernidad Política!!

From: Wikipedia.org

Retrato de Thomas Hobbes From: Wikipedia.org

Un hombre incomprendido por la Historia.

Hobbes es una de las figuras más facinantes del pensamiento moderno, sus aportaciones son innumerables y se encuentran en los más diversos campos del conocimiento. En su obra podemos encontrar reflexiones antropológicas, epistemológicas , psicológicas y políticas que se integran en un corpus unificado e integral.

No obstante, la totalidad de  su  obra ha quedado a la sombra de una pequeña parte de sus investigaciones, la relacionada con la Filosofía Política.

Ha sido tal el efecto que ha tenido su trabajo en el ámbito de las instituciones políticas y la sociedad que este autor se ha convertido en un referente ineludible para cualquier persona interesada en abordar estas cuestiones.

La opinión política generalizada  tiende a considerar que este autor es ideólogo y defensor de una forma de gobierno autoritaria y despótica  que evolucionó hacia los regimenes absolutistas  que se instauraron en Europa desde mediados del siglo XV.

Esta opinión no hace justicia al esfuerzo teórico llevado a cabo por el autor  para explicar y justificar sus conclusiones.  Es cierto que Hobbes defendió la necesidad de contar con un poder centralizado, fuerte y soberano, pero lo hizo como respuesta a un contexto socio-político complicado. En su pensamiento político hay mucho más de lo aparente.

From: publicdomainvectors.org

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Poco comprendido en su época.

Hobbes tampoco fué popular durante su vida. De hecho, tuvo una serie de enemigos poderosos que no dudaban en poner en cuestión sus conclusiones y atacar de manera directa su pensamiento. En concreto, fue muy conocido su enfrentamiento con la Iglesia de Inglaterra que lo acusó de ser ateo y promovió la quema de sus libros en el año 1.666.

Recordemos que la Iglesia de Inglaterra era encabezada por el Rey  desde la disputa entre el Papa Clemente VII y el Rey Enrique VIII, por lo que este hecho demostraba que  Hobbes no contaba con el favor del poder político. Pero… ¿cómo es posible que un autor que apostaba por un gobierno autoritario fuera atacado por esta manera por el poder establecido?

La respuesta a esta pregunta no resulta sencilla, pues nos obliga a zambullirnos de lleno en las profundidades de su pensamiento, que se caracterizaba por ser amplio, erudito e integral.

Disrupción Hobbesiana: la  construcción Humana del Poder Político

En nuestro anterior post vimos cómo durante la Edad Media se llevó a cabo un proceso de limitación del poder que ejercían los reyes y soberanos. Pese a que ésto significó un importante avance en la teoría política, el Poder seguía justificándose a partir de una serie de criterios arbitarios (la capacidad  militar de la clase interesada en limitar el poder Real) o metafísicos (Dios como fundamento último).

El Poder pertenecía a un ámbito superior , que estaba más allá de toda comprensión y capacidad de influencia del ser humano. Las personas simplemente eramos unos receptores de las decisiones o prescripciones que surgieran de la esfera de la Autoridad . No había posibilidad legitima de debate, discusión o problematización de las mismas.

El gran aporte de Hobbes a la teoría política ha sido considerar que el Poder surgía de un proceso de  construcción que podía ser descrito de manera racional a través de una serie de pasos   sucesivos que  permitían al ser humano evolucionar desde una condición de partida denominado Estado de Naturaleza hasta una condición social en la cual existían una serie de reglas y principios que gobernaban la convivencia entre los diferentes hombres, asegurando la seguridad y la vida de todos los miembros de la comunidad.

El Leviatán, la obra más conocida y citada de este autor, no es sólo un tratado político. De hecho, el libro es una  síntesis integradora de varias investigaciones que Hobbes adelantó a lo largo de su vida. Simultáneamente es un tratado de epistemología (pues se pregunta por la posibilidad del alcanzar un conocimiento cierto en el campo político y social), un tratado de psicología (pues indaga en lo profundo de la naturaleza humana) y un tratado de antropología (investigando por la convivencia entre los hombres). Sólo cuando  ha alcanzado las respuestas en estos campos,  Hobbes se aventura a indagar en el origen  y la naturaleza del Estado.

En la naturaleza del hombre encontramos tres causas principales de querella: la competencia, la desconfianza y la gloria. Thomas Hobbes. Leviatán.

Representación del Leviathan From:Flickr.com

La estructura del libro nos muestra que el orden político y el Estado se encuentran al final de un largo camino de construcción de relaciones de convivencia e instituciones  en una comunidad concreta. Este proceso se desarrolla de una forma racional,  teniendo como objetivo último garantizar la vida y la integridad de las personas.

Para el autor, antes de la constitución de los estados y las instituciones políticas, el ser humano vive en una situación denominada Estado de Naturaleza. En esta condición las relaciones personales se encuentran regidas por algo que se denomina Ley Natural, que podemos asimilar con la ley del más fuerte.  Aquel que tenga mayor capacidad física y pueda dominar por la fuerza a los demás podrá imponer sus condiciones y dominar a los demás.

Cuando dos hombres desean la misma cosa que no pueden gozar juntos se convierten en enemigos. Thomas Hobbes. Leviatán.

En el Estado de Naturaleza la vida humana se encuentra en permanente estado de amenaza, pues no existe ninguna convención que limite el uso de la violencia por parte de los particulares para alcanzar sus objetivo. Es una guerra de todos contra todos.

Ni siquiera aquellos más poderosos físicamente podían sentirse seguros, pues podían ser atacados a traición estando descuidados, o aún mientras dormían. Es claro, que  permanecer en el Estado de Naturaleza  no resultaba ser una opción agradable para ninguna persona.

El Contrato Social: creación y disrupción política.

Debido a que nuestra vida se encuentra bajo permanente amenaza es necesario salir del Estado de Naturaleza… pero ¿cómo lograr ese objetivo?.

La base de todas las sociedades grandes y duraderas ha consistido, no en la mutua voluntad que los hombres se tenían, sino en el recíproco temor. Thomas Hobbes. Levitán. 

Para Hobbes la única salida posible es  construir una comunidad política, entendida como un ente autónomo superior a la suma de todas las personas que la integran y en la que se designe a un gobernante que se convierta en la única persona que pueda ejercer de manera legitima la violencia y la coacción. Este gobernante será el encargado de establecer las convenciones y los límites para la convivencia en el interior del grupo.

El resto de los miembros de la comunidad renunciamos a nuestro derecho natural a ejercer la violencia para solucionar los problemas de interrelación que tengamos con los otros. Cualquier uso privado de la coacción que realicemos será considerado ilegítimo y deberemos responder ante el poder del gobernante que es ampliamente superior al nuestro.

Como contra-prestación a esta cesión de derechos  alcanzaremos la garantía para nuestra vida y nuestra integridad física, ya no tendremos que seguir mirando a nuestra espalda con el temor de ser atacados a traición.

A este momento en el que los individuos nos reunimos para ceder o enajenar nuestros derechos en una autoridad superior es el denominado Contrato Social. Su principal característica es ser el punto de origen del orden político, el momento creativo por excelencia y un fenómeno disruptivo en toda regla.

La revolución hobbesiana: semilla para un cambio social y político.

Cuando analizamos los grandes hitos de la historia moderna como son la Revolución Francesa, el surgimiento del modelo liberal, la Revolución Americana… etc., descubrimos que sus ideas fundamentales fueron formuladas por primera vez en por Thomas Hobbes.

Es por ello que considero como una gran injusticia histórica definir a este pensador como una persona de tendencia absolutista o autoritaria. Afirmar ésto es desconocer la riqueza de sus análisis, su capacidad de evaluar una situación social concreta y obtener un método racional para solucionar los problemas presentes en ella.

Las propuestas hobbesianas han  sembrado la semilla de dos ideas fundamentales para nuestra actual  cultura democrática:

  • El Poder no tiene un carácter sagrado, ni un fundamento metafísico.
  • Los gobernantes son elegidos de manera libre y racional por los miembros de la comunidad.

Con este Post hemos querido empezar a redimir la figura de Hobbes, sobre el cual seguiremos hablando dentro de 15 días, cuando estudiemos el momento de creación del orden político. Os esperamos !!!

 

 

 

 

 

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